viernes, 30 de abril de 2021

Victoria alada de Samotracia



También llamada Niké de Samotracia. Esta obra escultórica fue realizada durante el periodo helenístico (323 a.C. - 31 a.C.) por la escuela de Rodas, algunos expertos sitúan su autoría entorno a Pithókritos de Rodas aunque no hay estudios que lo demuestren de forma segura.

La obra representa a la diosa griega Niké, diosa de la victoria. Con una altura de 2,75 m y elaborada en mármol, esta obra pertenecía al santuario de los Cabiros en Samotracia.

Vista derecha

     Vista izquierda                               Vista derecha

Cuando fue descubierta en 1863 por Charles Champoiseau se pensó que fue mandada a esculpir por Demetrio Poliorcetes para conmemorar su victoria naval en Salamina en el año 306 a.C. pero estudios posteriores hacen más lógico pensar que en realidad se realizó para celebrar las victorias sobre Antíoco III Megas hacia comienzos del siglo II a.C.

Es una escultura de bulto redondo, realizada en mármol blanco de Paros. En origen, y como su base de mármol gris con vetas blancas da fe, esta obra quedaba unida a la proa de un barco con lo que su altura sería de unos 5,57 metros en total.

La diosa alada se alzaba en la proa de un navío (actuando esta como pedestal) y queda marcada por el contrapposto de su figura. Esta postura da una mayor naturalidad a la obra ya que rompe la tensión y la frontalidad de la misma.

Sus ropas son las que dan mayor naturalidad a la obra. Va envuelta en un fino chitón (prenda de vestir de la antigua Grecia) y un manto. Estos ropajes se pegan al cuerpo dejando entrever su anatomía. Esta técnica es conocida como técnica de "paños mojados" y es atribuida a las obras de Fidias. Ensalza así la sensualidad y el dinamismo de la figura que se completa con el alzado de las alas, enfrentando así el viento.


Vista frontal

La obra ha sufrido varias restauraciones. Entre 1880 - 1884 se reconstruyó el ala izquierda y el pecho de la figura; al terminar esta restauración la figura se ubicó en las escaleras Daru del Museo del Louvre. En el año 2013 el museo realizó otra restauración pudiendo incorporar 13 piezas a la obra, de este modo se recuperaron 3 plumas del ala izquierda y una mecha del moño; además se recuperó el aspecto original del mármol.


Detalle de la reconstrucción del ala


                  




     




jueves, 29 de abril de 2021

Espartaco

 

Todos conocemos sobre la existencia de Espartaco, pero, ¿quién fue Espartaco? Este fue un esclavo tracio de la tribu midoi (región influencia de Macedonia) que dirigió la Tercera Guerra Servil o guerra de los Esclavos contra la República romana en los años 73 y 71 a. C.


Espartaco, escultura en el Palais des Beaux-Arts (Lille, Francia).


Estatua de Espartaco, museo el Louvre, Denis Foyatier.

Cuando su pueblo fue invadido por Roma, él fue capturado y convertido en esclavo, al ver su fuerza lo compró un mercader para luchar en la escuela de gladiadores de Capua de Léntulo Batiato.


Relieve de gladiador hallado en Esmirna.


Mosaico hallado en el Coliseo romano, que refleja a un esclavo luchando con un león.


Representación de los gladiadores en la Villa Borghese.

Espartaco junto con otros esclavos gladiadores, donde destacan los celtas Casto y Cánico y los galos Crixo y Enomao, encabezaron un plan de escape que desencadenó en un conflicto en toda la península, ya que se les unieron esclavos fugitivos de todas partes, formando así un ejército muy multitudinario (se habla de que pudieron llegar a ser 120.000 personas, entre hombres, mujeres y niños) capaz de resistir e incluso vencer al equipado ejército romano formado por cualificadas legiones. Tras numerosas victorias, y, cuando casi logran la libertad cruzando los Alpes decidieron regresar para atacar la ciudad de Roma. La guerra terminó finalmente en el 71 a. C. con consecuencias nefastas para los rebeldes que no pudieron huir ya que las tropas romanas los capturaron y fueron crucificados a lo largo de la Vía Apia, entre Capua y Roma.


El juramento de Espartaco, escultura de Louis Ernest Barrias. Jardin des Tuileries, París (Francia).

Realmente no se sabe qué ocurrió con Espartaco ya que nunca se halló su cuerpo, pero los historiadores afirman que murió en el campo de batalla.

La historia de Espartaco ha sido muy utilizada en el mundo del arte, por ejemplo, vemos como existen numerosas estatuas de él, también lo ha sido en el mundo cinematográfico, donde destacan la película de Stanley Kubrick de 1960 donde Kirk Douglas es nuestro protagonista o la serie de televisión Spartacus: Blood and Sand, 2010 y sus sucesivas secuelas (Blood and Sand, Gods of the Arena, Vengeance y War of the Damned).



Poster de la cinta de 1960.


Serie de televisión Spartacus: Blood and Sand, 2010




Karnak

  Karnak o Ipet sut, “el lugar más venerado”, nombre que recibe en el Antiguo Egipto, es una pequeña población situada en la ribera oriental...